Mano de santo, crema reparadora de Gema Herrerías y Boticaria García
Mañana termina mayo, ay, y acabo de enterarme de que, además de ser una de mis épocas favoritas del año, es también el mes de la concienciación sobre la piel sensible...
Soy en mayo, como dijo el poeta Julio Martínez Mesanza, y en 2022 ha sido uno de mis meses más poéticos..., y en el que más me he cuidado la piel con esta poderosa cremita de título tan evocador.
Cuando empecé a utilizar este producto yo tenía las mejillas arrasadas en volcanes e islitas de granitos rojos.
¿Causas? El estrés, los primeros soles, un fotoprotector solar que me dio reacción...
Desde hace mucho tiempo confío en la parafarmacia en caso de cataclismo dérmico, y ahora no solo me fascina la parafarmacia francesa sino la española, concretamente la firma Gema Herrerías que tiene su local en la calle Asunción de mi Sevilla.
Mano de santo es un tratamiento reparador creado en colaboración con Boticaria García.
Está pensado como un tratamiento puntual, de botiquín de emergencia, aunque tiene una textura tan deliciosa y liviana, y un color rosa tan adorable, que yo me lancé alegremente a utilizarlo como mi hidratante de cabecera.
...Y no me arrepiento.
Como veis en los ingredientes, se trata de un cóctel de centella asiática, glicerina, pantenol, coco y principios activos vegetales como la adisonia, que lo convierte en una sensorial égloga, una cremita rotunda pero ligera, muy bucólica.
Y ahora llega el momento de las evidencias empíricas, que no sólo de poesía vive esta hobbit: ¿me ha mejorado la piel semejante bálsamo de Fierabrás? Juzguen ustedes mismos...
Estas fotos fueran hechas au naturel, sin más maquillaje que un ligero trazo de color en los labios.
Es cierto que todavía tengo algo de textura en las mejillas como se puede ver aquí:
Pero la calma que respira mi piel es innegable, fruto de esta crema, de mis paseos por el espolón de Logroño y de la muy calmante y reparadora lectura de los poemas de Enrique García-Máiquez.
Qué buena pinta tiene...
ResponderEliminarM.
Qué bien te sienta el azul turquesa. Últimamente tengo la piel cero reactiva pero tomo nota por si las moscas, que nunca se sabe.
ResponderEliminarUn besazo.
¡El azul turquesa es mi color!
EliminarGracias por leer y comentar...
Me alegro de que hayas encontrado esta joyita y que nos lo cuentes. Besos!
ResponderEliminarPues si tu dices q es mano de santo m haré con ella
ResponderEliminarLa alimentación desempeña un papel esencial en el grado de reactividad de la piel. A veces creemos que comemos bien pero ingerimos productos que no nos convienen y eso se refleja en la piel. No estoy hablando solo de los clásicos fritos y azúcares refinados: hay gente a la que el tomate, la piña o la fresa les hace polvo la piel por las reacciones que les provocan.
ResponderEliminarPor supuesto que eso influye, pero en mi caso tengo piel sensible coma lo que coma..., me la conozco muy bien, influye mucho más el estrés, el sol, el calor y el frío...
EliminarMe la acabo de comprar. Gracias.
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