Blush & Lift Peaches de Revolution: YouTube me hizo comprarlo

Más que YouTube, Ratolina. 

La sigo desde hace años, es más, la sigo gracias a una sabia recomendación vuestra. A ella le gustan los coloretes naturales y no es especialmente partidaria del tono melocotón, vira más hacia el rosado piel, ése que clona el color real de mejillas...

Así que no siendo coleccionista de coloretes de esta deliciosa tonalidad (como yo), el que mi youtuber de cabecera recomendase en vídeos, redes sociales y revistas de moda el colorete líquido Peaches de Revolution Pro me llenó de entusiasmo...

En realidad ella aconsejaba más otro tono, el Harmony que evoca un sonrojo natural, pero también enseñó en varias ocasiones y desde la más pura objetividad el tono Peaches que, como ya imaginareis, me hizo suspirar a primera vista.

Ni corta ni perezosa visité el Primor de la calle Sierpes de Sevilla (misteriosamente vacío y transitable, estábamos ya en fase dos), y por el módico precio de ocho con noventa y nueve euros llevo días maravillada con ese prodigio amelocotonado.

Un colorete líquido pero más bien cremoso, y muy fácil de aplicar gracias a su dispensador al estilo Shape Tape:

En mis clases de Didáctica de la Literatura explico lo que es un hito literario, esa obra que a lo mejor no tiene gran calidad (o sí), pero posee la virtud de abrir un camino que otros siguen creando toda una saga, por lo que para bien o para mal marca un antes y un después. 

Y si las cincuenta sombras abrieron el infinito surco de literatura pseudo-erótica-sado-machista, el corrector de Tarte, que en cambio goza de gran calidad, ha cambiado para siempre nuestra idea de los aplicadores. Ahora cuanto más grandes parecen más cómodos y precisos.

Esto es una fiesta, únete a la fiesta. Un rubor que se puede extender con los ojos cerrados, que siempre queda bien, que aunque ciertamente cálido y naranja recrea tonalidades naturales en la mejilla, que la refresca gracias a cantidades ingentes de mentol pero no estropea un cutis sensible...

Y que se aferra a los labios como un tatuaje, convirtiéndose en el arma perfecta para utilizar mascarilla, como se verá en próximos capítulos.