Rescato hoy esta sección en la que me maquillo con productos que no son en absoluto novedad, que llevan cierto tiempo alegrando mi tocador pero siguen vendiéndose en las perfumerías, y en esta ocasión con el aliciente de unos precios más que accesibles, ya que hablamos de Catrice.
Catrice es una firma que despierta en mí grandes amores y perezas infinitas: en general sus productos líquidos me parecen un nido de petroquímica, pero entre mis labiales favoritos de todos los tiempos estuvieron sus desaparecidas barras de labios Ginger & Fred (boca mordida) y Princess peach (adorable melocotón).
Hoy vamos a destacar por una parte sus delineadores de ojos, 18 h Contour & Contour, y por otra su fabulosa paleta de iluminadores y colorete Luminice.
Soy muy gansa a la hora de perfilar mis ojos: no quiero ni oír hablar de formatos en tintero o en rotulador. Mi mejor opción son los lápices retráctiles y tanto Essence como Catrice tienen ofertas baratas y más que interesantes en esa categoría.
Mi favorito es el número 20 de los 18h Contour & Contour de Catrice, un gris antracita muy oscuro y mate. Dura horas y horas intacto, aunque ¡dieciocho se me hacen muchas horas! No endurece como el negro, pero aporta hondura y misterio a la mirada.
Respecto a la paleta, posee la estructura tripartita que ya ha sido clonada hasta la saciedad por varias marcas: Sleek como firma pionera, ELF, Revolution, Nars en versión de lujo... Nos gusta tener todo lo que nuestro rostro necesita para brillar y rebosar salud campesina en un solo producto, y Catrice ofrece dos versiones, una con rubor y otra con polvos de sol.
Yo poseo la primera, que cuesta 6,39 euros y comprende dos iluminadores medios, uno color champán y otro más en tono piel o arena dorada, y un colorete que es pura luz amelocotonada, puro fulgor coral, metálico y nada evidente:
Por una vez no he fotografiado el polvo directamente sobre la yema de los dedos, suave y sublime como mantequilla, sino su transferencia sobre el dorso de mi mano: juzgad vosotras mismas el sobrenatural destello.
La luz que brindan estos iluminadores es poderosa pero sutil al posarse en la pel y reflejar su belleza sin marcar poros ni abrir su estructura:
Sinceramente, me cuesta mucho dejarme seducir por rubores de precio económico. Tengo siempre en mi memoria las referencias de casa de lujo demasiado frescas: la sombra de Nars es alargada. Pero esta paleta me sorprendió, me cautivó en su día y, tras varios meses de uso y abuso, aún sigo enamorada.
Te quedan muy bien
ResponderEliminarBesos
Gracias 😊
EliminarNormal q estés enamorada de la paleta. Es divina
ResponderEliminarMadre mía si es pura luz!
ResponderEliminarM.
Preciosa la paleta!! La verdad es que Catrice tiene joyitas super asequibles que merece la pena probar.Ah!! y parece que vuelve, y muy fuerte, el ojo enmarcado en lápiz negro mate.Probaré tu truco del tono gris oscuro porque a mi también me endurece demasiado el negro (y eso que lo amo).Besosss!!!
ResponderEliminarA mí es que el negro mate se me hace duro, por eso busco otras alternativas.
EliminarNo me extraña, es que es preciosa y qué bien te quedan estos tonos.
ResponderEliminarUn besito.
Gracias 😊
EliminarEs una preciosidad de paleta! Saludos!
ResponderEliminarBuah! Me encanta ese brillo, Catrice sabe hacer iluminadores. Respecto a las barras, creo que Ginger & Fred debe andar por algún cajón si sobrevivió a la última purga, tendría que buscarlo.
ResponderEliminarBesos!
Rocío, el cura de mi parroquia sigue tocando para misa como si no hubiera mañana. Sua fieles son mayores. Te ruego una oración por él, para que crea como santo Tomás. Se va a contagiar y no está la Iglesia para que pierda fieles.
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EliminarEs muy bonita la paleta y no parece nada purpurinosa (aunque sinceramente, me da un poco igual de la vida). La verdad, da qué pensar.
ResponderEliminarBesotes