Esponja de microfibra de Mercadona: la sensación del momento

Hoy os traigo otra entrega de la saga fuga “La sensación del momento”..., con  una protagonista que no va a fugarse precisamente de mi tocador: la esponja dispensadora de maquillaje recubierta de pelito de Mercadona, a imitación de la de Juno. Todo el mundo habla de ella, así que vamos a descubrirla.

Dejo claro desde el minuto uno que no poseo el original, así que esta reseña no va a ser un duelo en la cumbre: Ratolina tiene un vídeo reciente de este tipo, y Arro subió otro a tres bandas. Tampoco me motiva que se trate de un clon sino probar esta nueva textura que según mis gurús de belleza de cabecera regala un acabado precioso a la piel, multiplicando la cobertura sin dejar sensación de rostro cargado.

Dejo aparte la pereza que despierta en mí la perfumería del Mercadona..."Eres más aburrido que una colección de Deliplús", decía La Rebe en una de sus historias con toda la gracia. Pero cuando hacen algo bien..., lo bordan.
Por mis palabras habréis adivinado que a mí esta novedad me ha convencido, y mucho.

Por cuatro euros y medio, Deliplús nos ofrece una esponja de maquillaje envuelta en una carcasa en forma de huevo sorpresa, en un vistoso tono fucsia y, dato importante, con una celosía para que el producto aún húmedo pueda respirar. Marta decía que sólo por ella habría hecho la compra, y lo cierto es que el detalle encandila.

Vayamos a la esponja en sí. Platero este invento es pequeño, peludo, suave; tan blando por fuera, que se diría todo de algodón. De verdad, es la suavidad absoluta: me quedo embobada acariciándola... Y, por supuesto, libre de látex y por ello apta para mi piel sensible.

La prueba de fuego llegó a la hora de humedecerla: dobla casi su volumen y se suaviza todavía más. El crecimiento puede verse muy bien en relación con su carcasa: Literalmente, "se sale".

En esta imagen ya no es virgen nuestra querida esponja: había sido utilizada, manchada y lavada por vez primera. La limpié a conciencia con el desmaquillador en aceite 24K Gold de la misma marca: quedó impoluta y sin perder pelo, peligro del cual nos advierte Ratolina y que yo creo que depende mucho del limpiador que utilicemos: éste resulta eficaz, exquisito y embriagador en su aroma a flores paradisíacas.

Así quedó mi piel tras aplicar las últimas gotas del protector con color Fusion Water de Isdin, y como últimamente tengo por costumbre os enumero mis primeras impresiones:

1.- Sí que aumenta la cobertura, pero funde el producto en la piel con más armonía y naturalidad.
2.- Para mi gusto ha rebajado un tono el pigmento de "la base", habrá que tenerlo en cuenta. Con el protector solar me favorece porque ya me estaba muy oscuro.
3.- También matiza los brillos pero sin restar frescura, la sensación global es de “bien repartida” y de piel pulida y perfeccionada pero natural.

En definitiva, la nueva esponja de Deliplús es para mí mucho más que la sensación de un momento, triunfa en mi tocador.