El iluminador en formato gelatina es la sensación del momento, y yo me dejé llevar por esa sensación. No me avergüenza admitirlo: si intento no entrar en el esclavo discurso del ansia viva, tampoco comparto aquello, que a veces tiene mucho de pose, de "tanto boom me empalaga"... ¡Como blogger de belleza tengo una curiosidad cosmética que saciar!
Así que en mi último pedido a Maquillalia lo incluí, y no me arrepiento. Esto es luz hecha gelatina, magia de Galadriel encapsulada en un tarro cuadrado.
Lo comercializa Revolution Beauty, y en principio forma parte de su colección de navidad, pero espero de corazón que los directivos tengan cabeza lo dejen en el linea fijo. Lo hay en plateado, para mi gusto demasiado frío, y en dorado, demasiado cálido para mi piel.
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Así que opté por el tono oro rosa, muy a la moda y en el que han conseguido una luminosidad potente pero afín a una tez rosada.
Nada más abrir el tarro e intentar tomar producto con los dedos, te empapas de esa sensación gelatinosa, percibes un sorprendente frescor, te parece la textura más extraña que hayas palpado nunca y piensas: raro.
Sin embargo cambias de pensamiento al contemplar el acabado, que es de pura luz etérea, de "piel sobrenatural": ese sintagma tan manido, pero en esta ocasión tan cierto.
Porque regala un halo élfico, sin purpurinas pero muy poderoso y muy capaz de empoderar a cualquier mujer. Es como agua luminosa que se tatúa en tus pómulos, pues una vez la trabajas permanece imborrable durante horas.
Estas fotografías fueron realizadas a primera hora de la mañana pero a plena luz de un sol tímido: creo que exageré un poco en la nariz (¡de nuevo las modas parecen gobernarnos!), pero quedé maravillada del fulgor que emanaban mis mejillas.
Como si el tarro dorado fuera un regalo de la misma Galadriel.
A mi no me han llamado la atención, y de hecho me parece excesivamente brillante y es algo que no me gusta, ¡debo ser de las pocas a quienes no les gusta este efecto! me gustan las pieles muy luminosas pero ¡que salga de dentro! no se si me explico, tampoco me gustan los iluminadores en las alfombras rojas a las celebrytis cuando las veo, que hay veces que parecen platillos volantes, ja ja ja, vamos por así decirlo, que los iluminadores dejan una piel con un brillo poco natural que no ha acabado de enamorarme, ¡para gustos están los colores! ¿no?
ResponderEliminarBesos
Cada persona es un mundo, única, y eso es lo mejor que se puede decir de ella.
EliminarRespecto a este iluminador, es potente, metálico incluso, pero no tiene partículas tranquilitas y sí que parece surgir de dentro de la piel como tú dices.
Tengo ese mismo tono y me gusta mucho. En ti queda espectacular, chiquilla.
ResponderEliminarY a mí sí me empalagan los booms, la verdad, y ya sabes que de poses tengo poco (aunque me guste presumir de edad, que tampoco lo veo, jajaja....yo considero que más que presumo, asumo).
Besitos.
Jajajajaja pose no tienes, eres natural como la vida misma.
EliminarLo de presumir, se ha dicho mucho siempre en mi casa, cuando alguien repite su edad, pero en el sentido de: no presumas tanto de viejita, que todavía eres joven 😂
Te queda precioso y el formato me llama mucho la atención.
ResponderEliminarBesos
Ay me encanta, ¡te queda genial!
ResponderEliminarSabes que a mí dependiendo del boom, me dan ganas de prenderles fuego...Jajajaja.
Besos mil.
Esas fotos son preciosas, Rocío.
ResponderEliminarM.
Por supuesto, como potingueras de pro lo nuevo nos llama la atención, pero es cierto que cuando se machaca con un mismo producto pude provocar tanto atracción como repulsa por sobrecarga, y no es cuestión de pose, es cuestión de cómo te pille el cuerpo.
ResponderEliminarYo también lo tengo y es muy bonito.
Besos.
Lo que sí que es cierto es que cuando por ejemplo una marca envía un mismo producto a muchísima blogger y todas escriben lo mismo sobre el mismo producto, eso cansa. Yo creo que tanto Rebe como Gadirroja como tú os referís también a eso, que a mí también me llega a molestar.
EliminarTextura muy apetecible !! El acabado precioso, y te queda de maravilla. Besos desde Granada ����
ResponderEliminarNo soy de iluminadores intensos pero el tono que tiene es precioso. ¡Un beso!
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