Paleta On the rocks de W7: Instagram me hizo comprarlo..., YouTube también
Se me hace raro escribir una reseña sobre un producto que es sin duda la sensación del momento, aquello de lo que están hablando ahora mismo todas las cuentas de Instagram, YouTube y Blogger que se dedican al mundo de la belleza. Suelo huir de semejantes fenómenos de masas, pero en esta ocasión he caído al primer canto de sirena.
La primera vez que supe de la existencia de esta paleta fue, como no podía ser de otra forma, gracias a un vídeo de Ratolina que la comparaba con la famosa Subculture de Anastasia Beberley Hills. No me impresionó su supuesta aureola de clon, ya que ni tengo ni ansío el original, sino un par de sombras doradas que me hicieron suspirar, y otro par de tonalidades mostaza mate que me recordaron vivamente a la sombra Camel de Bobbi Brown que me tienta desde hace años.
Y hace un par de días, cuando Pórpora Porpita volvió a hablar de ella, me decidí a pisar la perfumería Primor en su busca.
La encontré al módico precio de cuatro euros con noventa y cinco céntimos y me la llevé a casa, junto a la Blazin que reseñaré próximamente...
Este es el momento de confesar que me siento mucho más cómoda en Primor por una razón: el panorama de la perfumería en Logroño ha cambiado mucho desde que Douglas se hizo con IF y con Bodybel, hay muy poca variedad y bastante monopolio. Aún así, solo compro allí productos que no pueda encontrar en el pequeño o el medio comercio, aún a riesgo de pagar un poco más: es el caso de firmas como W7, Oh! K o mi amada Pinkduck London.
La paleta On de Rocks de W7 es de cartón recio con espejo y cierre imantado, y me parece sólida y muy bonita, con ese color azul blue jean tan atractivo. Cuenta con ¡catorce sombras! y, aunque sé que alguna de las mates nunca las utilizaré, estoy tan enamorada de la otra mitad de tonalidades que, sinceramente, creo que por cinco euros merece muchísimo la pena.
Esa mitad de la que hablo pigmenta de un modo inefable, como muestran las yemas de mis dedos en la primera fotografía que ilustra esta reseña.
Un mundo de dorados exóticos y mostazas enigmáticos se abre ante mí, pero antes de desbordar los ríos de mi admiración hablaré de la única sombra que me ha decepcionado.
El topo mate llamado "Cheers". Su color estaba entre mi media docena de favoritos y cuando la toqué casi me echo a llorar. Si tomas el pigmento con el dedo se crea una costra en la superficie; si lo haces con pincel, se desmiga. Lasciate ogni speranza!
Sin embargo, debo decir que es la única sombra mate de la paleta que se comporta así. Dejando aparte mis preferidos, hay un ciruela y un par de marrones, uno oscuro y otro medio, que pigmentan que es un primor, y un tono petróleo llamado Curaçao que es absolutamente increíble. Y lo más admirable es su poder de transferencia, del dedo a la piel, que veréis en la siguiente imagen:
Curaçao es la sombra última a la izquierda. Pero, como ya he adelantado, mi corazón está con las sombras Piña colada, a la derecha, similar a la Camel de Bobbi Brown; Expresso Martini, un sublime color ámbar, y Champagne toast, mi gran amor de la paleta, un oro escarchado con fuerte matiz verde oliva. Y con estas tres he creado el look del día de hoy, un domingo en el que tenía un plan elegante:
Para trabajar la piel elegí la base Extra Mat Perfection de Deborah Milado aplicada con esponja Beauty blender. En los labios, la preciosa barra Anita de la colección de Navidad de Nars. Y en las mejillas, una mezcla del colorete melocotón de la paleta Master Blush Palette de Primark con el iluminador Peach Kiss de los Skin kiss de Make Up Revolution por encima.
Se ve una sombra rara en la mejilla derecha,¿verdad? Es, sin embargo, un efecto de la luz al realizar estas fotografías, razón por la que estuve pensando en publicarlas o no, pero los colores en el párpado se veían muy bien y eso es algo difícil, por lo que "lo dejé estar"...
Vamos con los ojos:
Apliqué Champagne toast en el lagrimal y primer tercio del párpado móvil con el pincel en forma de lápiz de Mac; después, con la brocha de difuminar de Wycon, Piña colada en la cuenca, y en la zona que quedaba vacía, Expresso Martini. Difuminé todo con un pincel limpio de Martora, que luego lo mojé en una sombra color vainilla mate de la paleta Blazin para aclarar el arco de la ceja.
Para las pestañas elegí la que es ya mi máscara de cabecera, Paradise de L´Oreal París, eso sí, extendiendo por encima una capa fina de la máscara de pestañas Waterproof de Aldi, a modo de producto de acabado para evitar el efecto ojera. Sí, hay un pequeño problema en el paraíso: el rímel de L´Oreal mancha un poco si me río o gesticulo demasiado.
Este fue el resultado, que no se desmoronó en ningún instante, ¿qué os parece?
Las cejas siguen sin depilar, aunque hojeando el suplemento de belleza de Telva me quedo más tranquila: se estilan "salvajes" y las he visto exactamente igual a como yo las llevo, y que yo llamaba "descuidadas", en al menos la mitad de sus páginas. Aún así, a principios de febrero, junto antes de comenzar mi tradicional poti dieta de cuaresma, me regalaré una sesión de cejas en el bar de Benefit y en las expertas manos de Marina, de Sephora Logroño.
#nofilter en ninguna fotografía del post |
La primera vez que supe de la existencia de esta paleta fue, como no podía ser de otra forma, gracias a un vídeo de Ratolina que la comparaba con la famosa Subculture de Anastasia Beberley Hills. No me impresionó su supuesta aureola de clon, ya que ni tengo ni ansío el original, sino un par de sombras doradas que me hicieron suspirar, y otro par de tonalidades mostaza mate que me recordaron vivamente a la sombra Camel de Bobbi Brown que me tienta desde hace años.
Y hace un par de días, cuando Pórpora Porpita volvió a hablar de ella, me decidí a pisar la perfumería Primor en su busca.
Este es el momento de confesar que me siento mucho más cómoda en Primor por una razón: el panorama de la perfumería en Logroño ha cambiado mucho desde que Douglas se hizo con IF y con Bodybel, hay muy poca variedad y bastante monopolio. Aún así, solo compro allí productos que no pueda encontrar en el pequeño o el medio comercio, aún a riesgo de pagar un poco más: es el caso de firmas como W7, Oh! K o mi amada Pinkduck London.
Esa mitad de la que hablo pigmenta de un modo inefable, como muestran las yemas de mis dedos en la primera fotografía que ilustra esta reseña.
Un mundo de dorados exóticos y mostazas enigmáticos se abre ante mí, pero antes de desbordar los ríos de mi admiración hablaré de la única sombra que me ha decepcionado.
Se ve una sombra rara en la mejilla derecha,¿verdad? Es, sin embargo, un efecto de la luz al realizar estas fotografías, razón por la que estuve pensando en publicarlas o no, pero los colores en el párpado se veían muy bien y eso es algo difícil, por lo que "lo dejé estar"...
Vamos con los ojos:
Para las pestañas elegí la que es ya mi máscara de cabecera, Paradise de L´Oreal París, eso sí, extendiendo por encima una capa fina de la máscara de pestañas Waterproof de Aldi, a modo de producto de acabado para evitar el efecto ojera. Sí, hay un pequeño problema en el paraíso: el rímel de L´Oreal mancha un poco si me río o gesticulo demasiado.
Las cejas siguen sin depilar, aunque hojeando el suplemento de belleza de Telva me quedo más tranquila: se estilan "salvajes" y las he visto exactamente igual a como yo las llevo, y que yo llamaba "descuidadas", en al menos la mitad de sus páginas. Aún así, a principios de febrero, junto antes de comenzar mi tradicional poti dieta de cuaresma, me regalaré una sesión de cejas en el bar de Benefit y en las expertas manos de Marina, de Sephora Logroño.
Me gusta la antepenúltima foto, y el maquillaje te ha quedado precioso. Las muestras que has hecho de las sombras me hacen pensar que merecerá la pena. Yo también disfruto de la Blazin y ando esperando la On the rocks, como tantas. Y, como a tí, me fascinaron especialmente de esta paleta los tonos mostaza :). Un beso, y disfrutémosla! (yo cuando me llegue!)
ResponderEliminarQué bien te sientan ese tipo de tonos. Yo llevo todo el fin de semana dándole caña y acabo de hacerme un look de lunes bien de verde. Por cierto que a mi la topo no me da problemas.
ResponderEliminarUn besito!
Debe ser una de esas sombras a las que les metes el dedo una sola vez y te la cargas. Un abrazo.
EliminarEstoy eserando que me llegue la paletita, pero creo que me va a gustar más de lo que creía.
ResponderEliminarMuy guapa con ese look, aún con cejas salvajes.
Besos!
Me la apunto¡¡¡ y muy favorecida con ese look¡¡¡
ResponderEliminarBesos
A mñi esta paleta me parece preciosa. Besos!
ResponderEliminarLa paleta es preciosa pero todavía no he picado con ella, el look muy bonito Rocío!!!
ResponderEliminarBesos
¡Gracias!
EliminarMe encanta la paleta, me he pasado por un Primor y no la he visto, lo mismo ni la han traído a ese, no sé si pasarme mañana por otro y ver... quién sabe.
ResponderEliminarBesotes
Es muy bonita y el look precioso, yo de momento tiro con lo que tengo, no tendré vida suficiente para gastarlo todo😄
ResponderEliminarEs muy bonita la paleta y me llama mucho porque la original de ABH me pirra, pero como de momento no me puedo permitir el precio de la original, puede que esta acabe cayendo. Besos!
ResponderEliminarJen, pues entonces como se dice... ¡corre a por ella!
EliminarNo me agrada la combinación de colores en esta paleta así que no me haré con ella.
ResponderEliminarUn beso.