The Body Shop personaliza sus mantecas corporales en Navidad (Black Friday´s resaca)
Tenía ya ganas inmensas de volver a entrar en una de las tiendas de The Body Shop, sin duda una de mis firmas favoritas en lo que a cuidado facial y corporal se refiere, que tristemente cerró su local en Logroño hace unos meses, dejando un inmenso vacío en mi neceser.
"Pero Rocío..., si puedes comprar en su página web", me diréis algunas, y con mucha razón. Y, sin embargo, no es lo mismo.
Porque no hay nada comparable al hecho de pasear una mañana soleada y fría de diciembre por la capital española y ver una acogedora tienda iluminada, con un carrito de helados de aire retro a la puerta para anunciar sus novedosas burbujas de baño, un juego del teje o rayuela pintado como con tizas en el suelo invitándote a entrar, un aroma goloso en el aire, dependientes amables y, para terminar de hacerte perder pie (y cabeza), un atractivo e interactivo ordenador con impresora que personaliza pegatinas para decorar la manteca corporal que hayas elegido.
Puedes escoger entre varios motivos navideños (y no navideños durante el resto del año), e imprimir tu nombre o el nombre del afortunado destinatario de la manteca. Me ofrecieron el servicio un par de sonrientes señoritas, y yo pensé que aquello encarecería algo el producto, ¡pero nada más lejos de la realidad!
De hecho, se notaban los últimos coletazos del Black Friday: deseaba reponer varios productos de la línea de camomila, y me dijeron que la segunda unidad de esta gama me salía por un cuarenta por ciento de descuento. Y cuando fui a pagar me aplicaron un bono de cinco euros de rebajas y me regalaron otro bono de diez euros para navidades, ¡y un champú de té verde el formato de venta al público! En resumen, que una compra que debía costar sesenta y siete euros salió por sólo cincuenta, con el añadido de un regalo que no me ha desagradado en absoluto.
Me llevé:
- Desmaquillador bifásico Waterproof de camomila: repito por tercera vez y creo haber hablado ya en varias ocasiones de esta joya que lo retira todo, todo y todo y con bonus track: calma la piel al momento. Y no, no me limito a utilizarlo en los ojos...
- Bálsamo limpiador de camomila: también es reposición aunque no sé si he hablado de él como es debido en este espacio, ¿os apetece una reseña detenida? Decid que sí, por favor, que estoy deseando escribirla...
- Muselina de algodón: el único chasco de la compra: se trata de un paño de algodón orgánico pero por el nombre yo me lo imaginaba una cumbre de la suavidad y resulta bastante normalito, de hecho ¡rasca, mamá!
-Y la manteca corporal de Hawaiian kukui en un tarro enorme de casi medio kilo que cuesta veintiséis euros y que vale cada euro de los que cuesta. Esta crema de cuerpo es aún más nutritiva y natural que las otras que haya probado de la marca, deja la piel sedosa e impecable y posee un aroma embriagador a una mezcla sutil de vainilla y cacao, navideña sin empachar. ¡Y me saluda cada mañana con un mensaje de lo más yo: "Spread the joy, Adaldrida"!
"Pero Rocío..., si puedes comprar en su página web", me diréis algunas, y con mucha razón. Y, sin embargo, no es lo mismo.
De hecho, se notaban los últimos coletazos del Black Friday: deseaba reponer varios productos de la línea de camomila, y me dijeron que la segunda unidad de esta gama me salía por un cuarenta por ciento de descuento. Y cuando fui a pagar me aplicaron un bono de cinco euros de rebajas y me regalaron otro bono de diez euros para navidades, ¡y un champú de té verde el formato de venta al público! En resumen, que una compra que debía costar sesenta y siete euros salió por sólo cincuenta, con el añadido de un regalo que no me ha desagradado en absoluto.
- Desmaquillador bifásico Waterproof de camomila: repito por tercera vez y creo haber hablado ya en varias ocasiones de esta joya que lo retira todo, todo y todo y con bonus track: calma la piel al momento. Y no, no me limito a utilizarlo en los ojos...
- Bálsamo limpiador de camomila: también es reposición aunque no sé si he hablado de él como es debido en este espacio, ¿os apetece una reseña detenida? Decid que sí, por favor, que estoy deseando escribirla...
- Muselina de algodón: el único chasco de la compra: se trata de un paño de algodón orgánico pero por el nombre yo me lo imaginaba una cumbre de la suavidad y resulta bastante normalito, de hecho ¡rasca, mamá!
-Y la manteca corporal de Hawaiian kukui en un tarro enorme de casi medio kilo que cuesta veintiséis euros y que vale cada euro de los que cuesta. Esta crema de cuerpo es aún más nutritiva y natural que las otras que haya probado de la marca, deja la piel sedosa e impecable y posee un aroma embriagador a una mezcla sutil de vainilla y cacao, navideña sin empachar. ¡Y me saluda cada mañana con un mensaje de lo más yo: "Spread the joy, Adaldrida"!
Por cierto, hoy hace nueve años que abrir este espacio, pero como dentro de seis días cumplo nada más y nada menos que 40 años, reservaré los fastos para entonces 😘🎂😂🎂😂
ResponderEliminarAdaldrida, para mí los productos The Body Shop serían perfectos si no fuera porque incluyen en su composición siliconas, PEGs, parabenos, phenoxyetanol etc. De hecho tengo alguna manteca corporal en casa a medio terminar por este motivo. Me da mucha rabia que siendo una marca abanderada de la protección de la naturaleza y del medio ambiente que utiliza materias primas de excelente calidad, no tenga reparos a la hora de utilizar químicos potencialmente tóxicos en los seres humanos. Ojalá se decidan a cambiar esto algún día. Si tienes la oportunidad, te recomiendo que pruebes la manteca corporal (Thick Natural Daurian Body Butter) de Natura Siberica, es natural a base de hierbas silvestres de Siberia. Yo ya no puedo vivir sin ella. Como siempre, un placer leer tus reseñas. Un abrazo.
EliminarTienes razón y esa es la causa de que yo no use algunas líneas de esta firma, como la “famosa “ de vitamina E que es pura silicona. Sin embargo creo que han variado a mejor en muchas de sus gamas como la de camomila para el desmaquillado o la capilar de arándanos, y son estas las que uso. Respecto a las mantecas corporales, la de kukui tiene manteca de cacao y de karité como primeros ingredientes. Es verdad que fastidia que otros productos de la misma marca sean tan industriales.
EliminarComo firmas realmente bío, me quedo con La Chinata, Essential aroms y Welleda.
Esa manteca me llama.
ResponderEliminarMuchísimas felicidades, amiga: por el blog, y por tu aniversario. Ya mismo te pillo, en ambos casos, jajaja!
Un besito!
Te salió redondo, sin duda!
ResponderEliminarQueremos reseña, obviamente, querida :P
Besos!
La tendréis, no se cuando pero la tendréis de aquí al final de año
EliminarEnhorabuena por el aniversario del blog. 🙌🙌😘😘
ResponderEliminarFelicidades por tus 2 acontecimientos¡¡¡¡
ResponderEliminarAlgo especial te tendrás que regalar por el 40 aniversario, :):)
Y sí, queremos reseña ..
Besos
Por supuesto, yo se lo contaré con pelos y señales. Ya tengo apalabrado algo friki, pero me gustaría un reloj Classic petit en oro rosa de Daniel Wellington y algo de maquillaje de Bobbi Brown, para tirar la casa por la ventana
EliminarMejor discos de algodón...
ResponderEliminarM.
Estoy contigo: para mi, aunque se pierda más tiempo es mejor ir a la tienda, primero porque ves el producto in situ, que muchas veces Body Shop me ha querido vender ascos a precio de pura magia y hay muchas cosas que no puedo comprar por formulación. Segundo porque generas trabajo: la gente de las tiendas se contrata a nivel de visitas, si no visitas las tiendas, despiden a gente, internet sólo necesita a gente que haga pedidos, porque los repartidores no son suyos. Tercero el feed back, muchas veces he entrado en páginas donde hago preguntas y no me responden, en la tienda tengo una respuesta y recomendaciones, compruebo olores, texturas y resuelvo dudas y si veo algo adicional pico. En una página no me da por lo mismo.
ResponderEliminar26 Euros en una crema ya puede tener el inci más brillante que el suelo del mayordomo de la tele, sino me es excesivo.
Besotes
Sí, de hecho si no hubiera tenido tan buenas ofertas en lo demás, No habría pagado lo que cuesta esta crema, fue un capricho pero la verdad es que llevaba tiempo queriéndola probar.
EliminarYo también he pensado muchas veces en que lo que genera de verdad trabajo son las tiendas físicas y no tanto las virtuales, y que hay que cuidar el comercio y a la gente que está detrás.
A mi también me la cerraron hace años y me dejó un vacío, desde entonces no he comprado nada, me limito por pasar por la tienda de Valencia de vez en cuándo a cotillear pero me da pereza, está demasiado llena de gente.
ResponderEliminarUn beso.