Atracón de Moringa en The Body Shop: bruma, sorbete corporal y crema de manos
Estoy aprendiendo a comer muchas veces y en pocas cantidades, ya que el hambre es mala consejera y provoca ansias absurdas que te hacen comer más de lo debido.
Esto, convirtiendo la realidad en metáfora, es lo que me acaba de suceder con mi anhelada visita a The Body Shop: en realidad yo iba a ver con mis propios ojos ( y mi tacto y olfato) las novedades de la firma, después de mil lecturas en blogs y revistas durante el largo verano. Y tantas ganas y tantos meses de ausencia me hicieron comprar de más.
Las nuevas cremas de manos me robaron tanto el corazón que me llevé a casa la de karité, que huele a sábanas limpias. Su envase retro me resultó familiar, (la sombra de L'Occitane es alargada), pero en cambio su textura acuosa e hidratante a la vez me sorprendió, a pesar de que ya iba sobre aviso. Y en el último momento, así como de pasada, elegí también la de Moringa. Y allí fue mi perdición.
Yo, que nunca había catado la gama de productos de Moringa de TBS, me vi abducida por un alocado arranque de lujuria cosmética al abrir el tubito y aspirar tan delicioso aroma. El furor cosmético se apoderó de mí y me hizo comprar el sorbete, la bruma y la colonia, y no digo la manteca porque los calores no lo permitían aún.
La moringa es la flor del árbol milagroso o árbol de la vida. A mí me olió en un principio a jazmín dulce y tropical, y efectivamente he sabido que en varios países del Caribe se le denomina como "jazmín francés".
De los cuatro productos que compré, me parecen muy especiales la crema de manos y el body sorbet. La colonia huele a maravilla pero es altamente suspirosa, no dura ni quince minutos en mi piel. Tras un par de pruebas la he guardado para regalarla en Navidad.
La bruma aguanta un poco más y permite reaplicaciones: me la he llevado a la oficina y me pongo morada a flis flis a cada poco; es un chute de bienestar que sabe a paraíso en medio del páramo laboral pero sale muy caro.
El sorbete es tan gozoso como eficaz y sorprendente. Una crema hidratante de verano. Una alternativa juguetona al body milk, que ni pringa ni se escurre por el cuerpo.
Me gusta utilizarlo en todo el cuerpo, salvo pies y codos que necesitan el formato manteca, pero sobre todo va a ser mi comodín para refrescar piernas cansadas durante todo el año. Parece un filtro mágico que desinfla, calma y hasta reafirma.
Me temo que éste no será mi último atracón cosmético durante estos meses de dieta: el lado bueno es que siempre podré alimentar con ellos este blog.
Esto, convirtiendo la realidad en metáfora, es lo que me acaba de suceder con mi anhelada visita a The Body Shop: en realidad yo iba a ver con mis propios ojos ( y mi tacto y olfato) las novedades de la firma, después de mil lecturas en blogs y revistas durante el largo verano. Y tantas ganas y tantos meses de ausencia me hicieron comprar de más.
Línea de Moringa de TBS |
Las nuevas cremas de manos me robaron tanto el corazón que me llevé a casa la de karité, que huele a sábanas limpias. Su envase retro me resultó familiar, (la sombra de L'Occitane es alargada), pero en cambio su textura acuosa e hidratante a la vez me sorprendió, a pesar de que ya iba sobre aviso. Y en el último momento, así como de pasada, elegí también la de Moringa. Y allí fue mi perdición.
Yo, que nunca había catado la gama de productos de Moringa de TBS, me vi abducida por un alocado arranque de lujuria cosmética al abrir el tubito y aspirar tan delicioso aroma. El furor cosmético se apoderó de mí y me hizo comprar el sorbete, la bruma y la colonia, y no digo la manteca porque los calores no lo permitían aún.
La moringa es la flor del árbol milagroso o árbol de la vida. A mí me olió en un principio a jazmín dulce y tropical, y efectivamente he sabido que en varios países del Caribe se le denomina como "jazmín francés".
Sorbete corporal |
De los cuatro productos que compré, me parecen muy especiales la crema de manos y el body sorbet. La colonia huele a maravilla pero es altamente suspirosa, no dura ni quince minutos en mi piel. Tras un par de pruebas la he guardado para regalarla en Navidad.
La bruma aguanta un poco más y permite reaplicaciones: me la he llevado a la oficina y me pongo morada a flis flis a cada poco; es un chute de bienestar que sabe a paraíso en medio del páramo laboral pero sale muy caro.
El sorbete es tan gozoso como eficaz y sorprendente. Una crema hidratante de verano. Una alternativa juguetona al body milk, que ni pringa ni se escurre por el cuerpo.
Textura del sorbete |
Me gusta utilizarlo en todo el cuerpo, salvo pies y codos que necesitan el formato manteca, pero sobre todo va a ser mi comodín para refrescar piernas cansadas durante todo el año. Parece un filtro mágico que desinfla, calma y hasta reafirma.
Me temo que éste no será mi último atracón cosmético durante estos meses de dieta: el lado bueno es que siempre podré alimentar con ellos este blog.
Sabía yo que te iba a gustar la moringa, se veía venir...
ResponderEliminarUn besote y a disfrutarlo!
Yo me quedo con las mantecas sin dudarlo de esta firma aunque no diría que no a la bruma de pomelo ^_^
ResponderEliminarUn beso.
La manteca de Moringa caerá en otoño...
ResponderEliminarCreo que voy a regalar el sorbete a mí madre que para las piernas lo va a notar, y cuando vaya otra vez me como el de pomelo rosa.
Jajaja La sombra de L'occitane es alargada...Me encantas.
ResponderEliminarHabrá que probar. Me encantan las colonias de jazmín.
ResponderEliminarEfectivamente le he regalado el sorbete a mí madre, ¡le ha encantado! Ayer lo metí en la nevera y luego le di un masaje en las piernas.
ResponderEliminarPor cierto, me han dicho que la manteca de melocotón y la de arándano las retiran, ¡maldición!
Y he bajado otro kilito, y van tres.
Me ha encantado el momento de abrir el tubito, casi como la magdalena de Proust.
ResponderEliminarmmmmm, cómo me gusta la línea de Moringa!! La manteca es amor verdadero <3 pero es verdad que para esta época aún calurosa no es lo más apetecible, tengo muchas ganas de probar los sorbetes, también porque como tú he leído mucho sobre ellos en blogs y tienen muy buena pinta y ahora que te leo, pues se me reantojan pero como me puede el ansia tengo un arsenal de cremas corporales, sobre todo de Rituals, que cada vez que ponen cosas como 30% se me nubla el juicio y acumulo como si el mundo se fuera a acabar, así que ahora mismo estoy servida de cremas y demás, pero cualquier día hago una locura, me ocurre de vez en cuando :-) Un besazo!!
ResponderEliminarMoringa me gusta mucho, pero no he probado el sorbete ni la crema de manos, así que a por ellos, oé.
ResponderEliminarPilar.
No la he probado, en general TBS me suele empalagar un poco sus olores.
ResponderEliminarBesos
Qué buena pinta tiene todo, yo tengo la crema de manos de fresa y es deliciosa.
ResponderEliminarMuack!