Reflexiones en la bañera... o en la ducha, o en el diván (XVI)

Hoy, un post-diván.

En verano no me baño, me ducho.
Agua helada, espuma tropical y música. Me subyuga el aroma de vainilla y tiaré del gel que lanzó Bourjois el año pasado. Es un olor a playa pero nada tópico, un acorde que no acude a la crema bronceadora o al ya sempiterno coco sintético... Es original, sensual y relajante.

Delices de soleil

1. Confieso que soy adicta a este embriagador gel. Y lo peor es que el bote agoniza, y no sé qué va a ocurrirme cuando se acabe. He visitado los muebles expositores de Bourjois y este año venden/ regalan otro gel con notas acuáticas que se llama no sé qué de París. Y yo soy muy fan de París, es mi ciudad favorita y en la funda de mi móvil, de estilo vintage, luce una preciosa torre Eiffel sobre un fondo como de carta antigua. Sí, pero... ¡en verano quiero trópico!

2. Sin embargo, andaba llorando por los rincones lamentando el inminente fin, cuando un par de compañeros de mi trabajo anuncian que se van. A emprender nuevos rumbos, se van con todos los honores y toca desearles suerte y alegrarse por ellos pero yo, que soy un Pobre Diablo Sentimental (en adelante PDS), no puedo evitar que me reconcoma la pena. Y miro el frasco a punto de terminar y me río de mí misma... como cuando tu madre, ante una rabieta absurda, te daba un ligero cachete y te decía: "¡llora, llora con fundamento!"

3. Aclaro que mi madre nunca obró de esa manera, pero lo vi en muchas amigas mías.

Funda de mi móvil

4. Y encima Molo deja ese programa de música tan magnífico que tenía, "Las cien y una noches" de Cadena 100. Y se me amontonan los cambios en su vertiente "gore", ya que como dije en Twitter, adoro los cambios cuando significan reto y aventura, pero los aborrezco cuando conllevan ausencia de personas y proyectos queridos. Esto es así desde siempre, pero se agudizó hace más de tres años cuando vine a UNIR porque lo mejor de mi trabajo son las personas con las que trabajo.

5. Y hasta hice un poema sobre mi aversión a las mudanzas que saldrá en mi próximo libro si algún día lo acabo. Os lo cuelgo aquí, como una primicia:

MALDITO HERÁCLITO

Me gustaría tanto bañarme en ese río,

con sus aguas tan fieles y apacibles:

esa frescura casi milenaria

y el sol enrojeciendo mis mejillas.

El río es para mí y yo soy para el río:

siempre las mismas ondas complacientes.

Pero maldito Heráclito, que dio

con el quid intrincado de esta vida:

meandros, huracanes, maremotos

y hasta una breve brisa despeinándote.

Voy a dormirme un rato para ver

si por lo menos sueño lo que soñaba ayer.

6. Mirad si es cierto lo que digo, que anoche viendo un capitulo de El ala oeste de la Casa Blanca (mi serie preferida), parecía que Sam iba a presentarse como candidato a gobernador en otro estado y yo pensaba "¡noooo! No lo hagas, que dejarás la Casa Blanca y la serie..." Y luego: "pero alma de cántaro friki, ¡¡¡que es sólo una serie!!!"

7. La vida como mudanza invade los guiones y repta hasta el mundo de la cosmética, ¡incluso descatalogan nuestro pintalabios favorito!

8. Por eso me chifla Jesusitodemivida,  que no cambia nunca... Ya lo dijo Santa Teresa, "Dios no se muda", que no significa que no se ponga ropa limpia sino que siempre es el Mismo, hoy ahora y siempre, vamos, ¡una bicoca!

9. Y quizás por todo eso he estado blandita por unos días, y hasta se me ocurrió darme un tiempo con el blog... porque yo escribo para compartir mi alegría, y en las raras ocasiones en las que no la tengo, creo que es mejor callar. Pero me habéis convencido, porque cerrarlo significaría multiplicar los cambios personales... y justo era eso lo que andaba evitando, ¿no?

10. Así que aquí seguimos. Luchando por la alegría que se esconde en cada lunes. To be continued.