Bricolaje cosmético: Tónico de camomila y árbol de té. (Mi primer vídeo serio en Youtube)
Una compañera de trabajo, Belén, me regaló un tarro de manzanilla de su pueblo, Duruelo (Soria), ya que me había oído decir que serviría para hacer un magnífico tónico para la piel. Las flores de manzanilla eran perfectas, bucólicas... parecían margaritas y estaban pidiendo a gritos una buena infusión para alegrar mi piel cada mañana.
Aproveché un apacible sábado para confeccionar casi medio litro de tónico, y como estaba conmigo mi primo Rodrigo, decidió grabar el experimento, editarlo y... aquí tienen mi primer vídeo (serio) de Youtube.
Risas, nerviosismo, ilusión a raudales en la tarde en la que nos pusimos manos a la obra. Ya veis que tengo voz de cría (o de hobbit), y que me trabuco en varias ocasiones: naturalidad al poder. Sí quiero pedir disculpas por mis errores de novata: repito varios conceptos a lo largo de la grabación, porque lo hicimos en varios tramos. Y el final no puede ser más abrupto.
Para la receta se necesitan:
- Dos cucharadas soperas de flores de manzanilla de gran calidad.
- Medio litro de agua mineral. Mis favoritas, por este orden, son: Evian, Solán de cabras, Peñaclara (que fue la elegida para conseguir un producto 1000% riojano), y Sierra de Cazorla.
- De cinco a diez gotas de aceite de árbol de té puro (puede ser cualquier otro aceite, lavanda, geranio... Éste último es muy caro pero le daría un plus de tratamiento y calma al tónico.)
- Una ampolla de vitamina E: lo más cómodo es comprar en farmacias Auxina E, pastillas de gel rellenas de vitamina.
Solo hay que infusionar, añadir el aceite esencial, la vitamina E pinchando la película de gel que recubre la ampolla, y llenar una botella. En mi caso no llegó a romper el hervor pero sirve igualmente. He dejado las florecillas flotando en el bote para que desprendan todo su poder.
Y éste es el resultado.
Despide, como digo en el vídeo, un aroma campestre y cautivador, mezcla de la manzanilla y el árbol de té. Lo conservo en la nevera, pero estoy buscando un frasco de cristal para trasvasarlo porque el plástico refrigerado no es sano.
Dedico este primer vídeo a Belén, a Rodrigo que me ha ayudado y alentado tanto, y a todos vosotros por leerme cada día. ¡Gracias!
La materia prima... |
Aproveché un apacible sábado para confeccionar casi medio litro de tónico, y como estaba conmigo mi primo Rodrigo, decidió grabar el experimento, editarlo y... aquí tienen mi primer vídeo (serio) de Youtube.
Risas, nerviosismo, ilusión a raudales en la tarde en la que nos pusimos manos a la obra. Ya veis que tengo voz de cría (o de hobbit), y que me trabuco en varias ocasiones: naturalidad al poder. Sí quiero pedir disculpas por mis errores de novata: repito varios conceptos a lo largo de la grabación, porque lo hicimos en varios tramos. Y el final no puede ser más abrupto.
Para la receta se necesitan:
- Dos cucharadas soperas de flores de manzanilla de gran calidad.
- Medio litro de agua mineral. Mis favoritas, por este orden, son: Evian, Solán de cabras, Peñaclara (que fue la elegida para conseguir un producto 1000% riojano), y Sierra de Cazorla.
- De cinco a diez gotas de aceite de árbol de té puro (puede ser cualquier otro aceite, lavanda, geranio... Éste último es muy caro pero le daría un plus de tratamiento y calma al tónico.)
- Una ampolla de vitamina E: lo más cómodo es comprar en farmacias Auxina E, pastillas de gel rellenas de vitamina.
... Y el resultado |
Solo hay que infusionar, añadir el aceite esencial, la vitamina E pinchando la película de gel que recubre la ampolla, y llenar una botella. En mi caso no llegó a romper el hervor pero sirve igualmente. He dejado las florecillas flotando en el bote para que desprendan todo su poder.
Y éste es el resultado.
Despide, como digo en el vídeo, un aroma campestre y cautivador, mezcla de la manzanilla y el árbol de té. Lo conservo en la nevera, pero estoy buscando un frasco de cristal para trasvasarlo porque el plástico refrigerado no es sano.
Dedico este primer vídeo a Belén, a Rodrigo que me ha ayudado y alentado tanto, y a todos vosotros por leerme cada día. ¡Gracias!
Qué gustazo de tónico ha quedado hasta bonito! Un besazo!
ResponderEliminar¡Qué bonito te ha quedado el video! ¡Me ha encantado! ¡Cómo se nota la experiencia ante las cámaras de las clases! ¡Qué voz más dulce! ¡Qué bien explicado todo!
ResponderEliminar...Y lo bien que lo has pasado!
ResponderEliminarMaría.
El video tiene su encanto, no te preocupes, y el tónico queda hasta decorativo.
ResponderEliminarBesos!
Me encanta la imagen de las flores de manzanilla, puedo hasta sentir su olor.
ResponderEliminarCreo que esta receta tuya, mágica, la voy a poner en práctica.
Voz de cria? Yo también :-P
Un beso.
Super instructivo el video lo voy a intentar.
ResponderEliminarjajaj os lo pasasteis genial que de eso se trata, y ademas nos enseñaste algo y eso siempre es interesante ;)
ResponderEliminarun abrazo
Pues qué gustirriniín algo así de natural. Un día me pondré a hacer potingues en casa, si señor, mucho más sano.
ResponderEliminarA mí no me hace nada de gracia el agua calentada en microondas, mucho más sano y directo un cazo al fuego.
ResponderEliminarEstoy segura de que el tónico quedaría muchísimo mejor por infusionar más profundamente y hasta la camomila se desinfectaría con mayor seguridad. Es hasta más armónico con la naturaleza: fuego, agua y flores...lo del micro de verdad es que...no puedo...
Luchi
Toda la razón tienes, Anónimo, y la próxima vez lo haré con un cazo a la lumbre...
Eliminargenial. gracias!lo voy a poner en practica
ResponderEliminarGracias por comentar. Al final le he añadido también una ampolla de vitamina E para conservar: esta tarde edito el vídeo para decirlo.
ResponderEliminarMuchas gracias compañera. Me alegra poder ayudarte con los ingredientes
ResponderEliminar¡Qué lujo! Da gusto poder usar cosas tan naturales y que te lo traigan expresamente ya es de lujo. Espero nos cuentes qué tal ha sido usarlo.
ResponderEliminarBesines.
Lo voy a intentar. Yo pondré FontVella...
ResponderEliminarqué guay!! gracias por el vídeo y la receta
ResponderEliminarpor cierto me ha encantado tu voz!!
besotes!!
Camomila con olor a plátano? Qué grande!! La verdad es que se nota un buen rollismo campestre genial. Queremos más vídeos.
ResponderEliminarEl tónico pinta muy bien, la misma receta pero sin aceite esencial (infusión fría de camomila) la uso como colirio improvisado para curar conjuntivitis, calmar ojeras y descansar los ojos. Y funciona. Yo nací con los lacrimales cerrados y mi madre me lavó con los ojitos con esto hasta que se abrieron, así que yo a las margaritas estas las debo mucho, de hecho tras los tulipanes, son mis flores favoritas.
Me encantan los tónicos caseros que recomiendas, los probaré y buscaré el aceite de geranio, que me da que tiene que ser la repanocha.
Besotes