Off Topic: ¿Era Ken así de macizo en nuestra infancia?
Nota: este es un post de despelleje, escrito sin ánimo de ofender.
¿Recordáis nuestras adorables Barriguitas? ¿Nuestras Nancys vestidas de Primera Comunión? Que levante la mano quien no ansió jamás la granja de los Pinipones... Ubi sunt?
Haciendo un alarde de objetividad puedo admitir que los Pequeños Poneys eran ya cursis en nuestra época, pero todos los demás juguetes ya nombrados eran el colmo del buen gusto y del azúcar en su justa medida.
Todo ha mutado a peor. Los ojos se han agrandado y lo ocupan todo. Los tamaños se han trastocado. Los colores se han enardecido. Y los dulces muñecos de antaño bailan entre una estética de cómic y un crudo hiperrealismo.
Al menos los Nenucos, aunque han sido retocados, guardan intacta su esencia... y las Barbies que ya eran tremendas cuando yo era niña siguen siendo igual de excesivas. Pero ¿Y Ken?
Al menos los Nenucos, aunque han sido retocados, guardan intacta su esencia... y las Barbies que ya eran tremendas cuando yo era niña siguen siendo igual de excesivas. Pero ¿Y Ken?
Tooooma ya! |
Por favor, qué alarde de realismo sucio. ¿Bañador de amebas? ¿¿¿Tableta de chocolate??? Absorta me he quedado, y no de admiración.
Probándome máscaras de pestañas en Kiko, seguía dándole vueltas. Una dependienta me dijo que en nuestra época los kenes ya eran escultóricos, pero claro, yo no los desnudaba, le respondí. Sin embargo recordé que a mí también me regalaron un Ken hawaiano, vestido de bañador, y no era así ni por asomo. Para empezar tenía un rostro mil veces más varonil. Éste parece que se ha echado colirio en los ojos y que acaba de salir de una peluquería de señoras.
Y ni siquiera tiene manos poderosas. Menos tableta de chocolate y más manos varoniles, señores. Si quieren jugar al hiperrealismo, tráiganos a un Ken con barba de un par de días, un traje de corte impecable, manos de pianista victorioso y una sonrisa verosímil. Así podremos jugar.
Jajaja Chapó! A mi me gustaría mucho más ese Ken que propones, esto está claro.
ResponderEliminarBESOS!
Te habrás quedao agusto, eh?
ResponderEliminarY el pelo no era pelo, era plástico, añado.
ResponderEliminarNo, no eran así de definidos, ni tenían cintura ni abdominales, ni la mirada perdida cual adolescente ambiguo.
Besos!
Ugg, la cosa ha evolucionado para peor.
ResponderEliminarLa verdad es que no he tenido Ken pero recuerdo los de mis amigas y no tenian tableta de chocolate, no.
Un beso.
Tengo un Ken de 1990 ahora mismo en la mano. Siento desilusionaros pero sí tiene tableta de chocolate y pectorales muy marcados. La principal diferencia que veo con el Ken de la imagen es el pelo. El Ken de 1990 tiene una gran mata de pelo de color castaño. Además, despliega una amplia sonrisa, enseñando unos dientes blanquísimos (al igual que Barbie). La sonrisa del Ken de la foto no transmite nada y tiene la mirada perdida. No os creais que hay tanta diferencia con la ropa. El Ken de 1990 lleva un pantalón lila casi fluorescente que pone KEN en la cintura y una chaqueta rosa casi fluorescente también con dibujos psicodélicos en azul y verde. Los principios de los 90 era la época de los neones y Mattel reflejaba esta moda en las prendas de sus juguetes.
ResponderEliminar¿No será qué cuando niñas no prestábais atención a determinados detalles anatómicos y ahora sí? El Ken de la fotografía no lleva camiseta y lógicamente por muy llamativo que sea el bañador, lo que llama la atención es el torso. Cuando éramos niñas, lo único que queríamos era poner toda la ropa que tuvieramos a los muñecos.
EliminarBueno... yo no es por ponerme pesimista, ni nada... y ya sé que no estamos hablando de ésto, pero, ¡es que todo está tan estereotipado!. Los juguetes son medios indirectos de socialización, poderosísimos, que reproducen roles sexistas e inconscientemente, los niños y niñas los interiorizan.
Eliminar¡Y el estilismo del muñeco es tan hortera!, aunque si miramos a nuestro alrededor, ¿cuantos Ken "reales" nos invaden?.
María.
Arya, bienvenida al blog.
EliminarSí, algo de eso hay, pero yo fui a la juguetería con ojos de niña, es mi punto friki... Y de todas formas, Ken en mi época estaba "tonificado", pero esos brazos y esa cintura (como apunta Miss Potingues) no estaban allí.
María, sin embargo basta mirar al rededor para ver belleza. El mundo está lleno de Kenes metrosexuales, sí, pero también de hombres de verdad. Caballerosos, atractivos...
Y habeis visto a la Nancy??? no es ella... no sé que le habrán hecho, brrrr
ResponderEliminarBesos,
Bueno, Barbie siempre ha estado buena, ¿no? Pues ahora Ken está bueno.
ResponderEliminarjajajajaja. que bueno! desde luego si nos aparece un ken así delante tampoco creo que le hagamos ascos. Pero a ese cacho de plástico... hasta da grimilla! XD
ResponderEliminarYo por no tener, no tuve ni Barbie, imagínate! Es lo que tiene criarse en un pueblo perdido de la mano de Dios, que prefieres pasarte el día por los huertos cazando sapos (marimacho que era una, lo reconozco). Eso sí, las Barriguitas son sagradas y las mejores muñecas del mundo! Y si no, los G.I. Joe, que eran mucho más másculinos con sus barbas y todo que estos Ken´s metrosexuales de ahora, y también mucho más divertidos.
ResponderEliminarBesos
Yo tuve dos Kenes, el primero no era Ken sino el Padre de la Familia Corazón (Días de diversión con la familia corazón...), y era apuesto y castaño, con anillo de casado y un traje aceptable.
EliminarEl Ken Hawaii mío era rubio pero con pelo de plástico y sonrisa radiante. Barriguitas al poder, y sobre todo la que tú me regalaste!
Lo mejor son las gafas azules que lleva en la mano... ¡Son totales! ¡Seguro que se las pone y pierde todo el glamour! ¡Con esas gafas seguro que parece uno del grupo de Mario Vaquerizo!
ResponderEliminarJusto ayer ojeando un catálogo de juguetes le comenté a mi madre: ¡Qué feos son los barriguitas de ahora! ¡Y los pinipones! Prefiero los de mi época.
ResponderEliminarYo Ken no tuve pero los Action Man estaban también muy bien como marido de mis Barbies jeje.Y sí que eran más masculinos que los de ahora.
Un saludo
No, no...ihhhh...no te pases, en realidad Barbie y Ken siempre van un poco más allá de lo establecido.
ResponderEliminarDe hecho yo nunca tuve ni pedí ni cogí a otras niñas la barbi porque no encajaba para nada con mis gustos de niña.
De ahí a hacer juicios de valor hay un abismo. Lo único que han hecho, conforea a la estética de SIEMPRE de Barbie y Ken ha sido marcar un poco más los músculos (cosa que está de supermoda entre los chicos y hombres...y no pasa nada, tiene que ver con el auge de la salud, aspecto saludable y la vigorexia) y abrirle un poco los ojos (antes eran un poco demasiado rasgados). Ni me gustaba antes ni me gusta ahora pero si nos ponemos así las barriguitas (de las que yo creo que tengo todas) empujarían a la obesidad, y nadie lo dice.
Loli
Tienes razón en lo de que la estética siempre ha sido ésa, pero a mí lo que me da grima es la desconexión entre la cara y el cuerpo.
EliminarY las barriguitas... eran niñas. Siempre se ha elogiado lo lustros de los bebés y nadie habla de apología de la obesidad...
Bienvenida al blog, Loli.
Pues a mi me gustaba más el nuestro, era más masculino con sus cejas pobladas y su mandíbula cuadrada... Naaaaa, que ya no es lo que era ni el Ken de la Barbie. Kenneth, tú antes molabas.
ResponderEliminarBesotes