Bésame mucho: Hoy, labios corinto y post de fantasía
Va a terminar ya el frío y yo aún no he hablado de la gran tendencia en labiales que ha asolado esta parte del planeta durante los últimos meses. En la primavera vuelven los corales, con una especial atención a los potentes rojos anaranjados que me permitirá sacar de paseo mi labial Heatwave de Nars... Pero, durante los últimos coletazos del nevado invierno, perdura aún la moda de los labios burdeos, ciruela, granate, vino... ¡corinto!
Gadirroja llamó a este tipo de tonalidades "Corinto", y con este giro lingüístico me cautivó por completo. La palabra Corinto me evoca la famosa epístola a los corintios sobre el amor, y también un ejército de pasas, que son la fruta de la lujuria. Nada de manzanas, nada de fresas. "Confortadme con pasas, que muero de amor", suplica la esposa del cantar bíblico a sus amigas, durante la ausencia del amado. Las pasas son un alimento de mucha enjundia, son adecuadas para todo ser que desfallece de pasión... y su color es perfecto para teñir los labios en los días invernales.
El corinto más bonito que he tenido fue un regalo de mi mejor amiga, el Dubonnet de Mac, pero se me terminó. Os muestro en este post tres labiales profundos que fueron adquiridos en temporadas anteriores a ésta gracias al consejo, directo o indirecto, de otras tres bloggers de belleza a las que admiro.
Cuando salieron al mercado los increíbles labiales mates de Nars, Kitty de Mil Caprichos me recomendó el tono Vesubio. A mí me asustaba bastante, y al final fue mi padre quien me lo trajo de París. Ahora que lo pienso, Heatwave fue también un regalo paterno...
Vesubio tiene un nombre literario y un color muy poético: es rico, granate, ardiente..., nada más rozar tus labios parece que los quemará.
Fue una compra de la pasada primavera, impulsada por este post de Salander. De nuevo el poder de las palabras: la autora del blog Viajando a todo color definió este labial como "un violeta rojizo" y yo no paré hasta verlo con mis propios ojos.Posee un resplandor helado, húmedo, sobrenatural. Es tan brillante que enamora, y no tan atrevido como para relegarlo a noches de gala.
El corinto más oscuro de los tres se lo debo a Miss Potingues, que lo recomendó en su blog. Y cómo no, se llama Zinfandel y el nombre me entró por los ojos incluso antes que la misma tonalidad.
Los brillos hidratantes de Isadora son amorosos: acondicionan el labio y lo nutren mientras recrean en él el tono del vino más brillante.
Zinfandel es una variedad de uva croata que también se cultiva en Italia y que en el siglo XIX llegó a California... El origen del nombre es desconocido, pero en mis oídos sonó como a conde ruso. El amante de una nueva Anna Karenina, el príncipe Sergei Zinfandel.
¡Fantasías de poeta potinguera!
De abajo arriba: Vesubio de Nars- RS 619 de Shiseido- Zinfandel de Isadora |
Gadirroja llamó a este tipo de tonalidades "Corinto", y con este giro lingüístico me cautivó por completo. La palabra Corinto me evoca la famosa epístola a los corintios sobre el amor, y también un ejército de pasas, que son la fruta de la lujuria. Nada de manzanas, nada de fresas. "Confortadme con pasas, que muero de amor", suplica la esposa del cantar bíblico a sus amigas, durante la ausencia del amado. Las pasas son un alimento de mucha enjundia, son adecuadas para todo ser que desfallece de pasión... y su color es perfecto para teñir los labios en los días invernales.
El corinto más bonito que he tenido fue un regalo de mi mejor amiga, el Dubonnet de Mac, pero se me terminó. Os muestro en este post tres labiales profundos que fueron adquiridos en temporadas anteriores a ésta gracias al consejo, directo o indirecto, de otras tres bloggers de belleza a las que admiro.
Matte lip de Nars en el tono Vesubio |
Cuando salieron al mercado los increíbles labiales mates de Nars, Kitty de Mil Caprichos me recomendó el tono Vesubio. A mí me asustaba bastante, y al final fue mi padre quien me lo trajo de París. Ahora que lo pienso, Heatwave fue también un regalo paterno...
- Papá, ¿de dónde vienen los pintalabios de Nars...?
- De París, hija, de París.
(Y no mentía el abnegado padre...)
Vesubio tiene un nombre literario y un color muy poético: es rico, granate, ardiente..., nada más rozar tus labios parece que los quemará.
RD 619 de Shiseido |
Fue una compra de la pasada primavera, impulsada por este post de Salander. De nuevo el poder de las palabras: la autora del blog Viajando a todo color definió este labial como "un violeta rojizo" y yo no paré hasta verlo con mis propios ojos.Posee un resplandor helado, húmedo, sobrenatural. Es tan brillante que enamora, y no tan atrevido como para relegarlo a noches de gala.
Zinfandel de Isadora |
El corinto más oscuro de los tres se lo debo a Miss Potingues, que lo recomendó en su blog. Y cómo no, se llama Zinfandel y el nombre me entró por los ojos incluso antes que la misma tonalidad.
Los brillos hidratantes de Isadora son amorosos: acondicionan el labio y lo nutren mientras recrean en él el tono del vino más brillante.
Zinfandel es una variedad de uva croata que también se cultiva en Italia y que en el siglo XIX llegó a California... El origen del nombre es desconocido, pero en mis oídos sonó como a conde ruso. El amante de una nueva Anna Karenina, el príncipe Sergei Zinfandel.
¡Fantasías de poeta potinguera!
El rojo de Shiseido es una maravilla de color!!
ResponderEliminarA mi Zinfandel me suena a hombre poderoso ruso, sí, me gusta tu interpretacion del nombre, y más me gusta añun que te guste ese tono tan especial que a mi me encanta.
Besos!
A mi los corintos me encantan, ya lo sabes ;) Y en tu piel clara quedan arrebatadores porque explotan de color, increíble! BESOS!
ResponderEliminarQuedan preciosos en tu piel pero me quedo con el de Shiseido sin dudarlo, que color más bonito y especial.
ResponderEliminarUn beso.
El Vesubio es precioso... un rojo de esos es indispensable en el tocador de cualquier mujer.
ResponderEliminarUn besazo!
A mi también me fascinó la palabra corinto. La verdad es que suena romántica. El tono Vesubio es maravilloso!
ResponderEliminarBesos
Enamorada del tono Vesubio!!!
ResponderEliminarHola, es una bonita palabra, no se con cual em quedaría, he decidido que me quedo con todos los tonos, son preciosos e intensos, besos
ResponderEliminarQue bonito es el gloss! :) Besos
ResponderEliminarNo sabría cual elegir, son tan especiales los tres colores...Aunque reconozco que el primero de NARS me ha robado el corazón. Y es que los describes tan...bien, que una no es de piedra :).
ResponderEliminarQué alegría leerte por aquí, Moli!
EliminarPor ahora va ganando el Vesubio que tiene cuaaaatro puntossss... Le sigue de cerrrca el RD 619 que tiene el poderoso voto de mareas y el mío (es mi favorito), y el de Miss Potingues: Cuatro a tes... ¡¡¡emociónnnnnn en la pista!!! El gloss se queda con un solo voto y con una mención de Miss P., digamos un punto y medio.
ResponderEliminarQue siga la carrera.
Jajajaja, a mí También me gusta + el de Shiseido, por lo que va a haber un empate... Haber si lo encuentro en Sephora y me lo compro.
ResponderEliminary lo mismo, pero en Low Cost? Nyx por ejemplo? hay alguno que merezca la pena? Aquí en Asturias Catrice ha volado. O se ha volatilizado. Algo de eso ha sucedido... están los stands vacíos, se ve que la fama de su calidad ha corrido como la pólvora.
ResponderEliminarHistorias del Metro
No me extraña, porque Catrice es mucho mejor. Te ecomiendo el tono 30 Giger and fred. No es corinto sino frambuesa pero es maravilloso.
ResponderEliminarUn corinto low cost es el merlot de los matte de Nyx que cuesta cuatro euros.
Me encantan estos tonos!!.Bsts!
ResponderEliminarEl último es el más raro... ¡me encanta! besitos
ResponderEliminarhttp://www.envueltaencrema.blogspot.com.es/
Me alegra de que te gustara el labial de Shiseido, es un color muy especial :-)
ResponderEliminarBesos!
Madre mía el último es la monda, todos me encantan, pero es que el brillo me parece lo máximo, me enamoran estos colores tan profundos! Besotes
ResponderEliminar