Ya es navidad...en Sephora
Año tras año, los almacenes Sephora se engalanan en Navidad sólo para nuestros ojos. Se visten de burbujas doradas, de cálidos tapices rojos. Se convierten en islas de luz debajo de la lluvia..., y nos regalan la más dulce de las tentaciones.
El año pasado mi padre me traía, de vuelta de su viaje francés y como regalo de cumpleaños, un dúo de sombras azules y plateadas de Nars, y me describía muy divertido los carteles que había encontrado en la impresionante tienda de los Campos Elíseos: en ellos se decía que, en cuestiones cosméticas, la tentación... ¡no era pecado! Y mi padre se rindió ante la picardía alegre y de un insultante buen gusto que derrochan los creativos de esta cadena tan especial.
Todos los años encontramos en Sephora una línea corporal navideña, compuesta por deliciosas cremas, aceites brillantes y baños de burbujas para vestir de fiesta nuestra piel. Sin embargo, en esta ocasión decidí que el aroma de esta temporada, en el que predominan las notas olfativas de galleta y avellana, me resultaba demasiado dulzón para usarlo en mi persona... y me decanté por la vela y el patito.
La vela perfumada de la línea "Sweet cake" creará ambiente en el recibidor de mi casa, porque ¿quién puede resistirse al olor de tarta navideña mientras cuelga su abrigo en el perchero?
Y el pato vibrador... es algo que llevo deseando tener desde que hace tres o cuatro años lo viera en las brillantes estanterías de Sephora: lo he visto en versión dorada, rosa y ahora negra con topos plata... y me parece la perfecta combinación entre lo kitsch y lo vintage, un guiño a mi niñez en la que tanto abundaron los patos de goma salpicando mi bañera.
Pero el adjetivo "vibrador", tan alejado de la idea de dulzura e infancia, me cohibía y detenía ante su compra... Sin embargo he visto que Sephora añadió un segundo apellido más acorde a mis gustos: ¡¡¡masajeador!!! Un pato masajeador es algo irresistible y nada sonrojante.
LLegué a casa y vi que incluía una pila... y me dije, ah qué bien trae repuesto... detallazo de los de Sephora.
Pero no.
Había que abrir el pato (con un destornillador, supuse), y meter la pila dentro. Yo tengo en casa una caja de herramientas que me dejó mi padre, pero es que ni siquiera la he mirado. No se me dan bien estas cosas, supongo que en esto he sido educada a la antigua usanza.
Afortunadamente, mi primo Rodrigo Luján vino el sábado a ver la película Tiempos modernos de Chaplin en mi home cinema, y entre risas y cocacolas le enseñé el artiligio preguntándole ¿me puedes abrir el pato? Carcajada brutal y luego estupor infinito al probar el invento y ver que, efectivamente, ¡masajea!
En la espalda es una auténtica delicia. Ejerce un masaje suave pero firme, y relaja los músculos en un santiamén. Y emite un sonido muy parecido al de una maquinilla de afeitar, por eso me pasé el pato por la barbilla mientras lo rotaba en movimientos circulares...
Tarde gamberra para preparar las fiestas que se avecinan.
Publicidad de Sephora en parís |
El año pasado mi padre me traía, de vuelta de su viaje francés y como regalo de cumpleaños, un dúo de sombras azules y plateadas de Nars, y me describía muy divertido los carteles que había encontrado en la impresionante tienda de los Campos Elíseos: en ellos se decía que, en cuestiones cosméticas, la tentación... ¡no era pecado! Y mi padre se rindió ante la picardía alegre y de un insultante buen gusto que derrochan los creativos de esta cadena tan especial.
Sephora Navidad 2011 |
Todos los años encontramos en Sephora una línea corporal navideña, compuesta por deliciosas cremas, aceites brillantes y baños de burbujas para vestir de fiesta nuestra piel. Sin embargo, en esta ocasión decidí que el aroma de esta temporada, en el que predominan las notas olfativas de galleta y avellana, me resultaba demasiado dulzón para usarlo en mi persona... y me decanté por la vela y el patito.
La vela perfumada de la línea "Sweet cake" creará ambiente en el recibidor de mi casa, porque ¿quién puede resistirse al olor de tarta navideña mientras cuelga su abrigo en el perchero?
Y el pato vibrador... es algo que llevo deseando tener desde que hace tres o cuatro años lo viera en las brillantes estanterías de Sephora: lo he visto en versión dorada, rosa y ahora negra con topos plata... y me parece la perfecta combinación entre lo kitsch y lo vintage, un guiño a mi niñez en la que tanto abundaron los patos de goma salpicando mi bañera.
Pero el adjetivo "vibrador", tan alejado de la idea de dulzura e infancia, me cohibía y detenía ante su compra... Sin embargo he visto que Sephora añadió un segundo apellido más acorde a mis gustos: ¡¡¡masajeador!!! Un pato masajeador es algo irresistible y nada sonrojante.
Patito Vibrador-masajeador Oh my cherie de Sephora: 20 euros |
LLegué a casa y vi que incluía una pila... y me dije, ah qué bien trae repuesto... detallazo de los de Sephora.
Pero no.
Había que abrir el pato (con un destornillador, supuse), y meter la pila dentro. Yo tengo en casa una caja de herramientas que me dejó mi padre, pero es que ni siquiera la he mirado. No se me dan bien estas cosas, supongo que en esto he sido educada a la antigua usanza.
Afortunadamente, mi primo Rodrigo Luján vino el sábado a ver la película Tiempos modernos de Chaplin en mi home cinema, y entre risas y cocacolas le enseñé el artiligio preguntándole ¿me puedes abrir el pato? Carcajada brutal y luego estupor infinito al probar el invento y ver que, efectivamente, ¡masajea!
En la espalda es una auténtica delicia. Ejerce un masaje suave pero firme, y relaja los músculos en un santiamén. Y emite un sonido muy parecido al de una maquinilla de afeitar, por eso me pasé el pato por la barbilla mientras lo rotaba en movimientos circulares...
Tarde gamberra para preparar las fiestas que se avecinan.
Pero, pero pero... ¿qué es esto?
ResponderEliminar¡A mí no me la das!
¡¡¡Vibreitorrrr!!!!
Mola un huevo, el pato lo veo todos los años y digo me lo compro, me lo compro y nunca lo hago...quizá este año con esa versión tan mona¡¡.
ResponderEliminarY la cara de tu primo, me da la risa y todo.
Un beso.
El pato, lo llamemos como lo llamemos,o lo usemos como lo usemos, es lo que es: una cucada!jjjj!
ResponderEliminarMe encanta, es monísimo.
Ponga un pato en su vida!
Besos.
Pero qué majo es ese pato! Yo también tengo uno de esos que te hacen masajes en la bañera, pero es de los amarillitos de toda la vida. Seguro que me hago con este para que le haga compañía.
ResponderEliminarBesos
Lo que me he reído con el pato, jaja!
ResponderEliminarPues no sabía que sacaban una línea corporal navideña en Sephora, y eso que estuve el domingo. Conociéndome seguro que esos olores empalagosos me encantan, jaja!
Es del tipo de las de chocolate, té verde, limón...? Y tienen manteca corporal?
Picarona!!!
ResponderEliminarCaramelo de Pomelo
El pato se que acabaría en el baño de mis niñas y no sé yo, pero te prometo que me tienta jaaja BESOS!
ResponderEliminarJajajajaja, genial la oración: "¿me puedes abrir el pato?", jajajaja, me muero de la risa, genial, de verdad, me has alegrado la tarde, chica.
ResponderEliminarUn saludito!
Ay por Dios... quiero ese patorrrr ahora mismo.
ResponderEliminarTe ha quedado un post muy divertido, yo me quedo con la vela, me encantan las velas perfumadas navideñas, dan muchísima calidez al ambiente. Saludos!
ResponderEliminarXDDDDDD bueníssssimo lo del pato!
ResponderEliminarUn besito!
Deja de mandarte comentarios sola,gilipollas,que se te ve el plumero a distancia...
ResponderEliminarPor supuesto, Anónimo, todos los comments de este blog los escribo yo, luego me respondo, entro doscientas cincuenta mil veces en mi propio blog y me linkeo a mí misma hasta llegar al puesto 10 en el desaparecido Wikio, ahora Ebuzzing... También me sigo por tuiter... no tengo pero da igual, me sigo...tengo una vida tan estresante...
ResponderEliminarUn consejito: deja de leer un blog que no te gusta solo para dar por ahí, querido o querida, que se te ve el plumero a distancia.
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ResponderEliminarEl Coco, disculpa. He borrado tu comment porque ya he contestado al anónimo yo, y me parece que te has exaltado un poquito.
ResponderEliminarGracias a pesar de todo.
Soy otra anonima distinta. Muy majo el post, pero vamos que yo tengo el patito en blanco y el uso que le doy es otro mas XXX. Una de las 2 lo usamos mal jaaja. un beso guapa
ResponderEliminarTengo las cervicales para que se me paseen 400 patos como esos XD. Besotes
ResponderEliminarSephora es una marca que por lo general me gusta, creo que la relaciòn precio-calidad es bastante coherente. Gracias por el post.
ResponderEliminarAdaldrida,
ResponderEliminarVeo que entiendes del tema, así que, por favor, aconséjame: ¿qué base de maquillaje recomendarías? No tengo ni idea de cuál es la mejor y la que tenía se me está a punto de gastar. No me desagradaba, pero estoy segura que hay de mejores.
Graciaaas :)
PD: tenemos bastantes puntos en común :P
Hola Eva, ¡qué alegría tenerte aquí! Bienvenida.
ResponderEliminarTe aconsejo la base que estoy utilizando yo ahora: Double wear Light de Estee Lauder.
No es barata (35 euros) pero es buenísima.
Si tu problema son los brillos y quieres cobertura muy alta, es también buenísima la Colorstay de Revlon, y su precio ronda los 22 euros. Pero si tu piel es seca no te la recomiendo.
Si quieres poca cobertura y un plus de tratamiendo, te recomiendo la BB cream de Garnier.
Un beso.